Landed

Licenciado en Enfermería

Residente de Costa del Este

Pasados varios terremotos económicos – sociales, culminando el 2001 con la conocida frase “que se vayan todos”.
Nosotros aprendimos a ser más fuertes y creativos, en el 2002 con la compra de Liliana de un terreno en Costa del Este, fue un motivo valido para escaparnos algunos fines de semana a desenchufarnos de la selva de cemento y el stress.
Sentimos que eran muy buenos y saludables los momentos en disfrutar de los silencios, del canto de los pájaros, el verde y la caricia de los vientos del mar. Percibimos esa sensación del espíritu que sería nuestro lugar en el mundo.
Pasando el tiempo fuimos invirtiendo nuestras energías y recursos para vivir cuando nos jubiláramos.
En el 2020 nos sorprendió la pandemia, complicado por trabajar en el sistema sanitario, recién en el 2022/23 pudimos tramitar nuestro “jubileo” y comenzar a disfrutar de este paraíso.

Para mantener y preservar este paraíso debemos trabajar mucho con pasión y esfuerzo, nuestra fortaleza debe ser la unidad, con convicciones, conciencia y constancia.
Evitemos ser influidos por prejuicios propios o ajenos.
Los valores como la honestidad, el respeto, la humildad, la verdad y la ética son importantes por tratarse de una construcción social y cada uno de nosotros tiene una finalidad o propósito que le da sentido a lo que estamos “haciendo”, que sería la misión.
Los valores son la vara con que nos medimos, si es alta nos nivelamos para arriba, si es más baja nos nivelamos para “abajo” y esto último no queremos.
La visión es la meta a donde vamos, que sería en primer lugar “Nosotros los que vivimos aquí en Costa del Este”, cuidar nuestro entorno ambiental y social, protegernos, cuidar nuestra salud y mejorar la seguridad y calidad de vida en forma constante.

En segundo lugar, debemos cuidar a los turistas que son la materia prima o activos $ de la Costa, es importante buscar la forma de tratarlos bien con alegría, bienestar y seguridad, que se sientan como en su casa, y en toda casa existen reglas, obligaciones, derechos, empatía, amor, etc.
La mejor inversión es atraer los buenos espíritus – pensamientos, energías positivas, que también atraen buena salud, riqueza espiritual y material.
Los resultados exitosos se logran con esfuerzo, continuidad, sacrificios, unidad sin distinción alguna y sin influencias dogmáticas.

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